Por TERCER año consecutivo, la Agencia Tributaria ha puesto en marcha en el 2019, desde el mes de mayo, un plan de envío masivo de cartas a pequeños negocios, con venta directa al público, con el fin de atacar la economía sumergida.

En el 2017, por ejemplo, este envío de cartas fue seguido con la realización de 14.500 visitas, logrando aumentar de forma espontánea en un 10% los ingresos por IVA provenientes de esos establecimientos en los trimestres siguientes hasta alcanzar los 256 millones, según datos de la AEAT.

LA NOVEDAD DE ESTE AÑO

La novedad respecto a los dos años anteriores en los que se ha puesto en marcha el plan, consiste en que la carta informa al contribuyente de ratios de negocio medios del sector en el que operan (relativos a márgenes de negocio y cobros en efectivo y en tarjeta) para poner de relieve que los indicadores del suyo discrepan de las líneas generales y que eso puede ser interpretado como una síntoma de riesgo fiscal.

Es de “agradecer” la frase que nos pone al final la Agencia tributaria en su notificación «Esta carta es una mera comunicación, por lo que no debe contestar, enviar documentación, ni justificar el importe de los datos que se desprenden de sus declaraciones, ni de los abonos que puedan existir en sus cuentas bancarias. Simplemente le trasladamos la información de que dispone la Agencia Tributaria», o dicho en otras palabras, “ya está Vd. en nuestra base de datos, haga las cosas bien porque si no es así, iremos a verle….”

«El objetivo es que la gente se conciencie, que declaren de forma voluntaria y que sepan que, si se desvían, Hacienda tiene datos suficientes para inspeccionar», apunta José María Peláez, de la asociación Inspectores de Hacienda del Estado (IHE). Desde el punto de vista de Peláez, este tipo de actuaciones son de gran eficacia para estimular el cumplimiento voluntario y liberar recursos de la Inspección para perseguir el fraude más voluminoso o a los contribuyentes que, pese a haber sido avisados, no han modificado las pautas de sus declaraciones. «Es una tendencia que va a continuar y acabará extendiéndose a todos los sectores«, pronostica Peláez.

En esta estrategia encaja, también, el reciente envío de 700.000 cartas a titulares de pisos en alquiler.